Cuando quieres dar un giro en tu vida, cambiar de forma importante, dar un golpe de timón… A veces aunque lo sabes, aunque lo sientes necesario… el miedo se apodera de uno mismo y nos impide hacer cambios.

Aquí os dejo un caso real, de alguien que consulta con la angustia de necesitar un cambio en su vida. De la plataforma Apol donde colaboro. Podeis leer el original aquí.

CONSULTA:
Desde hace bastante tiempo me siento descontento con mi carrera profesional, siento que no encajo con mi profesión, no siento ningún tipo de ilusión. Siempre quise ir a la universidad y estudiar trabajo social o terapia ocupacional, ahora con mis 27 años me arrepiento de no haber optado por ese camino. Algunas veces pienso que quizás no sea demasiado tarde pero me da miedo dejar mi bienestar actual y comenzar un camino nuevo. Sé que si sigo como estoy seguiré lamentándome de mi situación pero el cambio me da bastante miedo y más a mi edad. Ahora no paro de darle vueltas a este asunto y me está creando bastante ansiedad.

RESPUESTA:
La incertidumbre y el miedo a lo desconocido son dos de los peores enemigos del ser humano a la hora de iniciar y gestionar cambios. No nos gusta no saber qué nos espera, y a veces hacer cambios en nuestra vida rutinaria nos aterra. Cuando hemos conseguido establecernos, crear rutinas y hábitos, nos sentimos estables y nos ayuda a evolucionar, pero también tiene sus partes negativas, y es ese miedo al cambio.

Planteas la posibilidad de un cambio, pero suele dar miedo salir de la zona de confort. Está comprobado que cuantos más conocimientos tenemos de los que nos rodea, menos riesgos nos gusta correr, independientemente de que tengamos un carácter aventurero o conformista. Pero como tú ya sientes, parece que tienes la decisión tomada, hay una voz dentro de ti que cada vez se hace mas fuerte. Como ya vimos en Redes, muchas decisiones están tomadas antes de que nos demos cuenta. Por lo que cuando nos has escrito ya sabías qué quieres hacer con tu vida, ahora falta animarte, buscar el valor.

Como salir de la zona de confort resulta en ocasiones complicado, te aconsejamos que traces un plan. Por escrito mejor, plásmalo para que no te agobie en la cabeza. De esta manera puedes valorar mejor los pasos a dar, poco a poco, busca tu ritmo. Tal vez dejarlo todo, tal vez empezar a estudiar de nuevo mientras te dedicas a tu actividad actual, tal vez apuntarte a un voluntariado que canalice tus ganas de ayudar. Hay muchas opciones posibles para empezar, pero dentro de tu cabeza todo puede ser muy confuso. Sientes las ganas de cambio pero también el miedo y así es complicado que puedas ser objetivo. Mira el lado positivo: te has dado cuenta de que quieres y necesitas un cambio, en ocasiones esto no ocurre y te encuentras con muchos años más, atrapado en un bucle que no te gusta y del que no sabes cómo salir. En una buena oportunidad para mejorar tu bienestar.